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En una conferencia de prensa celebrada en Madrid poco antes del comienzo de la Cumbre UE-Latinoamérica y Caribe, Morales dijo también que el Partido Popular, el principal de la oposición española, apoyó la intentona según supo por la prensa.
"Yo solamente he leído en informes de prensa que es el PP mediante una fundación", señaló Morales sin dar más detalles al ser preguntando qué partidos españoles pudieron colaborar en el intento de golpe.
"Por qué no hay un golpe de Estado en EEUU? Porque no hay embajador de EEUU", declaró Morales en tono sarcástico y destacó que "ganamos esa batalla".
"Fracasaron los intentos de un golpe de Estado", reiteró al señalar que desde agosto a octubre de 2008 "se decidió el futuro democrático del país", en el que su gobierno consiguió la aprobación del Congreso para realizar un referéndum sobre la reforma constitucional.
Preguntado sobre cómo cree que afectarán a Bolivia los recortes anunciados por el Gobierno español en materia de cooperación, Morales respondió que aunque considera "importante" esa ayuda, "no es decisiva ahora".
"Lo que puede afectar a Bolivia es si no nos compran petróleo o gas o si el precio baja", puntualizó.
Morales expresó su compromiso en combatir la corrupción en Bolivia y destacó los progresos económicos alcanzados desde que está en el poder, como "la transformación estructural", especialmente en el sector de hidrocarburos, y explicó que el año pasado su país tuvo uno de los crecimientos económicos mejores de América Latina.
"La propiedad privada está garantizada por la Constitución boliviana", subrayó Morales, quien afirmó que "tenemos grandes coincidencias con algunos empresarios españoles", aunque reconoció que también hay "diferencias" con hombres de negocios europeos en general.
El presidente de Bolivia manifestó su deseo de tener a Europa "como aliado", y pidió a los europeos que no expulsen a los inmigrantes bolivianos.
Sobre el rechazo de Bolivia a firmar un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea dentro de la Comunidad Andina de Naciones (Ecuador, Perú Colombia y Bolivia), Morales alegó "diferencias programáticas e ideológicas" con "países de corte capitalista", a la vez que dijo que espera que "nos entiendan".
Ecuador, como Bolivia, rechazan un acuerdo de libre comercio con la UE, que, sin embargo, firmarán mañana en Madrid Colombia y Perú, y en su lugar piden un acuerdo de asociación con el bloque europeo.
http://www.xornal.com/artigo/2010/05/18/espana/morales-acusa-pp-apoyar-golpe-estado/2010051811093800527.html
A la derecha española le molestó la visita a Garzón
El Partido Popular (PP) afirmó que es "intolerable" que la Presidenta argentina "venga de fuera a dar lecciones de respeto a la Justicia". Así lo manifestó Soraya Sáen, portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, después de que ayer Cristina mostrara su apoyo al juez Baltasar Garzón, suspendido cautelarmente de sus funciones en la Audiencia Nacional de España por investigar los crímenes del franquismo. También se quejó el sindicato de ultraderecha Manos Limpias, que fue uno de los que interpuso la querella contra Garzón.
Cristina Fernández de Kirchner y su marido "son los menos indicados para dar lecciones de Justicia y de seguridad jurídica a nadie", afirmó la dirigente conservadora española.
Por ello, pidió al Gobierno español que no permita que nadie "ponga en entredicho" a las instituciones españoles, si bien matizó: "Cuando desde dentro del Gobierno las debilitan, algunos desde fuera se ven legitimados para hacer lo mismo".
La presidenta de Argentina se manifestó ayer preocupada, dolida y sorprendida por el caso de Garzón, toda vez que la decisión del Tribunal Supremo le resulta "una regresión en la concepción de la justicia universal en materia de derechos humanos".
En tanto, en un escrito dirigido a la embajada de la República Argentina en España, el secretario general del sindicato ultraderechista Manos Limpias, Miguel Bernard, manifestó su "total rechazo y repulsa a la injerencia de la presidenta de su país en asuntos de la Justicia española".
Según Bernard, el encuentro que Cristina mantuvo con el juez español supone un aval "a un imputado en tres causas penales" y una "censura" a la Justicia española. "Su presidenta se descalifica por sí misma en sus actuaciones y manifestaciones y debería preocuparse de sanear un entrañable país al cual le ha sumido en una ruina económica e institucional", concluye el escrito.
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